Un gato callejero es el culpable de que la mitad de los hogares de la ciudad siberiana de Ulán-Udé siguiese ayer sin calefacción por segundo día consecutivo, con temperaturas exteriores de hasta 30 grados bajo cero.
El pasado domingo, el felino provocó un cortocircuito en la central termoeléctrica número 1 de Ulán-Udé al caer en el dispositivo de distribución. Como consecuencia dejaron de funcionar tres de los cinco grupos de calderas y cuatro de las siete bombas de la central termoeléctrica que abastece a la mitad de la ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario